Musa
Hace lunas que no vuelves
a despeinar mi sueño,
a escribirme la piel con tu caricia,
a marearme
con el humo encendido de tu voz,
a hacer alquimia con el miedo
hasta alumbrar
el fuego de los versos.
Hace noches que despierto
con las manos vacías.
Sólo este ramito de silencio.
Hace lunas que no vuelves
a despeinar mi sueño,
a escribirme la piel con tu caricia,
a marearme
con el humo encendido de tu voz,
a hacer alquimia con el miedo
hasta alumbrar
el fuego de los versos.
Hace noches que despierto
con las manos vacías.
Sólo este ramito de silencio.
5 comentarios:
una preciosidad a pesar del ensombrecimiento por tu censura en casa ajena
No entiendo este comentario, pero por si acaso no censuro.
Dispueta a la conversación.
Un saludo, J. G.
Anoche le pregunté a una de las musas, si era posible escribir un poema de una sola palabra, me respondió:
"Imposible".
A mi me da muchísimo gusto también, Paula. Por lo que leo, la Musa sigue ahí.
Y si despiertas con ese sobresalto, bueno, incendia la luna con los músculos preciosos de tu germinar.
Un Abrazo tremendo...
El remate del poema es perfecto...
saludos
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